Gladiadores en los sueños.
Quizá pueda sonar raro en el título, pero el fenómeno de los gladiadores fue algo tan popular y extendido en su época, que al parecer eran sueños muy recurrentes, o al menos lo suficiente para que Artemidoro (padre), un hombre que dedicó su vida a viajar y recoger historias de sueños para hacer estudios sobre el significado de los mismo, le dedicó parte de su obra a aquellos en los que aparecían gladiadores. En total aparecen 10 menciones a los gladiadores, y un capítulo exclusivo dedicado a ellos.
Normalmente os publico aquí artículos fruto de mi investigación e interpretación, más hoy, sin embargo, me voy a dedicar a hacer una traducción comentada, ya que la intención es mostrar lo que el primer párrafo apunta, y saciar la curiosidad acerca del tema.
En una de las primeras partes de su libro, llamada “Sueños específicos” (1)Artemidoro nos aclara que soñar con gladiadores, normalmente vaticina una boda. Incluso más adelante(2), nos indica el tipo de mujer con el que se ha de contraer matrimonio en referencia a la armatura gladiatoria que aparece en los mismos:
“Por ejemplo, si uno combate con un Thraex, se casará con una esposa rica, astuta y con afán de protagonismo. Rica, porque él está cubierto de armas pesadas; astuta, porque su espada no es recta, y dispuesta a sobresalir porque este gladiador es el que ataca. Si lucha con un murmillo(3) contraerá matrimonio con una mujer hermosa, discretamente adinerada, fiel, amante de su casa y obediente al esposo, ya que este tipo de adversario cede terreno, está bien protegido y su panoplia es más completa que la precedente. Si lucha con un secutor, alcanzará una cónyuge bella y pudiente, pero que se mostrará muy orgullosa debido a su fortuna y será la causante de múltiples males, pues esta clase de combatiente persigue siempre. Si se enfrenta con un retiarius, tendrá una compañera pobre, lujuriosa, callejera y pronta a ceder ante una proposición. Un hippeus predice que la esposa será acaudalada y de buen linaje, pero con poco seso. El essedarius advierte que la consorte será perezosa y fatua. El provocator augura una mujer de bellas formas y bonita, pero coqueta y sensual. El dimachaerus y el llamado arbelas revelan que la mujer será una envenenadora o, por el contrario, malvada y fea.”
En el capítulo llamado “lactantes”, Artemidoro nos cuenta que si un gladiador “y a cualquier practicante de una actividad deportiva” sueña que de sus pechos sale leche, esto está pronosticando una dolencia o enfermedad, pues “solo el sexo débil segrega leche”(4).
Soñar con ejercer de gladiador, a parte de vaticinar matrimonio, puede ser también vaticinio de verse envuelto en algún tipo de querella o litigio, pues es común entre gente en esta situación soñar con esto, o con el pugilatio. Los elementos defensivos en estos sueños implicarán que será acusado, y los elementos de ataque que se acusará a alguien.(5)
Más avanzado en el libro, Artemidoro dedica una sección a los Dioses, nos dice que los gladiadores que sueñan con los hijos de Ares, (Terror y Espanto) son buenos augurios. Lo curioso es que lo engloba con generales, soldados y piratas, bajo la premisa de “todos aquellos que aman el riesgo”(6).Sin embargo, para cualquiera que no pertenezca al colectivo de los que aman el riesgo, soñar con estos mismos Dioses, vaticina que estos le causarán males.
Otro sueño curioso, es uno en el que un hombre soñaba estar en una caja de madera llena de sangre, siendo transportado cual pompa fúnebre, y que en un momento dado, lo posaban en el suelo y su madre se mostraba disgustada con él. Resulta que el hombre, después de eso, se convirtió en gladiador. El análisis del sueño que hace Artemidoro, no deja de ser curioso:
“Un individuo soñó que era llevado en vilo por algunas personas en una artesa llena de sangre humana y que comía de esta sangre coagulada. Y que, luego, su madre, saliéndole a su encuentro le decía: «Hijo mío, me has deshonrado». A continuación habiéndolo depositado sus portadores en el suelo, se marchó a su casa, según le pareció ver. Pues bien, él se alistó como gladiador y durante muchos años participó en combates a muerte. El hecho de comer sangre humana significaba, en efecto, la manera cruel e infame de ganar el sustento mediante el derramamiento de la sangre de un semejante. Las palabras de la madre hacían referencia a su indigno modo de vivir, y el traslado en la artesa aludía al peligro incesante y continuado, porque las cosas que se depositan en su interior son consumidas por completo. Y quizá él habría muerto a mano de los gladiadores, si no hubiese vuelto a casa, al ser depositado en el suelo. En realidad, después de mucho tiempo, fue licenciado de su servicio, por haberse interesado algunas personas por él.”(7)
Este último sueño, es bastante interesante por todas las connotaciones de fondo que nos deja. Nos especifica que es un hombre que voluntariamente se convierte en gladiador, y no solo eso, si no que elige cuando dejarlo. Lo que nos da una visión de que pese a ser una profesión peligrosa, también podía ser una carrera profesional deseada. La frase de la madre nos deja también patente la marca de la infamia.
A este respecto, tenemos una artículo de M.Carter donde trata este tema de forma más extensa.(8)
NOTAS:
1-Artemidoro, La interpretación de los sueños, 2·5
2-Artemidoro, Op.Cit. 2·32
3-La palabra murmillo es una suposición del traductor, ya que la nota original está en mal estado y no se aprecia la palabra.
4-Artemidoro, Op.Cit 2·16
5-Artemidoro, Op.Cit 2·32
6-Artemidoro, Op.Cit. 2·39
7-Artemidoro, Op.Cit. 5·58
8-Carter, M. (2015), Bloodbath: Aartemidorus, ΑΠΟΤΟΜΟΣ Ccombat, and Ps.-Quintilian´s “The gladiator” en Zeitschrift für Papyrologie und Epigraphik 193, 39–52