El retiario
Ya llevamos un tiempo sin monografías, y hoy he decidido traeros la de mi gladiador favorito: el retiario.
Empezaremos hablando de sus orígenes, y es que aunque es un gladiador fácilmente reconocible y del que es sencillo haber oído hablar o tener una imagen subconsciente cuando decimos “el de la red y el tridente”, pocos saben de donde sale y que fue uno de los quizá, más tardíos, apareciendo hacia finales del S.I a.C. Al menos, la primera representación que tenemos de él, data del último cuarto de ese siglo, y no es más que un vaso hallado en Lyon.
Hay diferentes teorías sobre su inicio, indicándolo en tres contextos distintos. El primero de ellos surgiría de un elemento cotidiano, como es la “lucha” entre un pescador y un pez1, siendo el pescador interpretado por el retiario y el pez por el murmillo, si bien a día de hoy, esa hipótesis ha sido ampliamente superada. Otra de los contextos es el religioso/ritual, relacionando la creación de esta armatura con la representación de Neptuno2, por un lado, y en un contexto ritual de las culturas del norte de italia como los Camunii3, ambas también descartadas en general en el mundo académico en favor del último contexto que os daré: el militar. Son dos las teorías que se formaron en torno al contexto militar, la primera es un duelo entre dos militares: Pittacus de Mytiline y Phrynon de Atenas. Las fuentes4 nos dicen literalmente que el primero “se acercó con el aparejo de un pescador, lo enredó en las mallas de su red, lo atravesó con su tridente y lo remató con una puñalada”5. No obstante, no está muy secundada actualmente en el mundo académico en favor de la teoría de que el retiario surge de querer representar el asedio de Tiro por parte de Alejandro Magno en los anfiteatros, ya que sabemos que los habitantes de esta ciudad se defendieron de los atacantes con redes y tridentes. Esta última teoría es, como ya dije, la más secundada6 día de hoy por el mundo académico.
Es una armatura que no ha variado desde sus inicios, aunque se han encontrado evidencias de ligeras modificaciones que o bien apenas tuvieron relevancia, o fueron otras categorías gladiatorias que gozaron del desinterés del público y pasaron sin pena ni gloria, pero eso ya es otra historia, de la que hablaremos en otro post. Tampoco ha variado de rivales, enfrentándose en un principio a murmillos para en algún momento, bajo el mandato de Claudio, pasar a ser rival del secutor o murmillo contra rete, que no es más que una adaptación del propio murmillo (modificaciones en el casco y el escudo para evitar que la red se enganchase) y excepcionalmente del scissor.
En cuanto a su equipación defensiva, en esta ocasión, tendremos una sección breve, ya que salvo el protorretiario descrito por Gilbert, que si llevaba armadura y casco, siempre ha luchado sin más protecciones que la manica y el galerus. Los datos sobre los elementos comunes a todos los gladiadores, como las manicas, los podéis consultar aquí, y sobre el galerus pasaré a hablaros a continuación.
Galerus
El galerus es una pieza metálica que se coloca sobre el hombro en el mismo brazo que la manica, y que protege, a parte de la propia articulación, la cara del retiario, ya que al encarar de lado a su rival, con un corto y sencillo gesto, el retiario esconde por completo su cara, haciendo las veces este elemento, de casco/escudo. En lo páctico, no tiene mucho más, pero como sé que os gustan los datos, vamos a ver los detalles. En cuanto a medidas, la de la imagen que adjunto tiene 30,5cm de alto por 31 de largo totales. La parte que encaja directamente en el brazo mide 21,5 por 11,2 y una profundidad de la curvatura de 8,2cm. El grosor varia desde los 1.4 mm en las partes mas finas a los 3.05mm en las mas gruesas (el borde). Todo esto suma un total de 1,1 Kg. Se ha encontrado algún modelo más, aunque consultando su ficha de museo, las medidas son casi idénticas, y para hacernos una idea, nos llegan estas.
En cuanto a su equipación ofensiva, las armas vamos, tenemos una sección interesante: tridente (también llamado fuscina), la red y dos tipos de puñales, de los que lamentablemente, no he podido conseguir la ficha técnica con las diversas medidas. En fin, vamos al lío:
Tridente
Lamento deciros que no nos ha llegado ningún ejemplar de tridente en un contexto gladiatorio, aunque si tenemos cabezas de tridente encontradas en otros contextos, como puede ser la exhibida en el British Museum de Londres. Sin embargo si que tenemos numerosos relieves y estatuillas que nos permiten hacernos una idea de la mofología de los tridentes que, en general, gozaban de un gran mástil y una cabeza relativamente pequeña, lo que se intuye en una ligereza del arma.
Red
Tampoco tenemos ejemplares de redes que nos hayan llegado a nuestros días y de nuevo tenemos que volver a los mosaicos y relieves y lanzar hipótesis. Lo que aquí dejaré reflejado no es más que la mía en base a mi experiencia y las investigaciones que he hecho desde ese campo: la práctica. Hay quien dice que la red medía sobre 3 metros7 de diámetro, si bien yo me muestro en desacuerdo, no por que piense que no existían redes así, si no por que dudo que hubiese un tamaño estándar o aproximado. Es cierto que en el arte de la época (y en el actual) la percepción/intención del artista varíe los objetos, pero es tal la variedad de tamaños representados, que creo que sería algo muy lejos de estar estandarizado, o que de estarlo, se haría en función del usuario de la misma. A lo largo de mi vida como recreador he probado muchas redes distintas, de distintos tamaños y configuraciones, y he llegado a la conclusión de que el tamaño de la red es un arma de doble filo. Cuanto más grande, mejor atrapa al rival y más difícil es deshacerse de ella, pero al mismo tiempo, más complicada de manejar es y más lento se vuelve su vuelo, permitiendo al rival el llegar a esquivarla. Para mi el tamaño ideal oscila entre los 1,5 y los 2 metros de diámetro. Cosa que me parece muy plausible dentro de las evidencias que tenemos y su interpretación.
Por otro lado me gustaría también hablar de la plomada de las redes. Siempre se ha asumido que las redes iban lastradas con plomos, y quiero resaltar aquí su importancia para el correcto vuelo, caída y captura del rival. No concibo útil una red sin algún tipo de lastrado en sus extremos.
Para terminar, mencionaré la spira, que básicamente es una cuerda que una la red a la mano. En todos los ensayos que he leído hasta la fecha donde se la menciona, se asume que esta iba atada a la muñeca, pero un análisis concienzudo de las evidencias gráficas en las que aparece este elemento (ya que no siempre que hay una red se ve la spira) nos deja ver que realmente sabemos que está unida a la muñeca, pero no como (no se aprecian nudos o lazos que puedan atestiguar que está realmente atada), pudiendo esta estar atada de diversas maneras o incluso, simplemente agarrada.
Puñales
En muchas de las representaciones modernas que encontramos de retiarios, les vemos con un puñal al cinto o bien en la mano, si bien en fuentes arqueológicas solo lo encontramos en la segunda de las opciones con diversas morfologías, desde el más triangular, semejante a los pugios militares, hasta otros más estrechos y alargados. Teóricamente éstes tenían el uso de cortar la spira de la red, pero desde que no todos muchos retiarios aparecen representados sin red, pero difícilmente sin puñal, es más que obvio su uso ofensivo (claramente reflejado en la tercera imagen, donde el secutor se está quitando el puñal de su espalda), sobretodo si contemplamos el cambio de morfología hacia puñales mas estrechos y alargados que les permitirían sobrepasar los escudos de sus rivales con más facilidad.
Tenemos también un raro “puñal” aunque más bien sería un estilete de 4 hojas, que podemos apreciar en al menos un par de lápidas dedicadas a gladiadores (como la del gladiador Skirtos, en el museo Nacional de Bucarest, cuya imagen adjunto), y del cual conservamos la marca de impacto en uno de los huesos de gladiadores del cementerio de Éfeso. Su uso específico o la razón de introducción de este curioso arma, a día de hoy, sigue siendo desconocida para mi.
NOTAS:
1Rinaldi, S. (2013) Gladiatori: per l´onore, per la gloria. La morte non ha più importanza, Armando Curcio Editore, p. 120.
2Gilbert, F. (2020) Gladiateurs: Histoire et Armement, Historic´one Editions, pp. 57
3Battaglia, D. & Ventura, L. (2015) De Rebus Gladiatoris: From the Greek gymnasion to the Roman ludus, via ancient funeral rites, Ars Dimicandi, pp. 160-163
4Polieno, Stratagemata, I·25, Estrabon, Geografía, XIII·38 y Festo, De verborum Significatu, 359·8
5Estrabon, Geografía, XIII·38
6Gilbert, F. (2020) Gladiateurs: Histoire et Armement, Historic´one Editions, pp. 57; Battaglia, D. & Ventura, L. (2015) De Rebus Gladiatoris: From the Greek gymnasion to the Roman ludus, via ancient funeral rites, Ars Dimicandi, p. 163; Mañas, A. (2018) Gladiadores: el gran espectáculo de Roma, Ariel Historia, pp. 95-96; Junkelmann, M. (2008)Gladiatoren: Das spiel mit dem tod, Philipp von Zabern, p 125… por citar algunos de renombre.
7Lillo, F (2011) Gladiadores, mito y realidad, Evohé Didaksa, p.30 o Cagigal, R. (2018) Gladiator: luchar para vivir en un oficio peligroso, JANO reproducciones históricas, p.81.